Futuro, futuro, qué me deparas, ¿pequeño traidor?
Nada bueno, nada malo
Solo algo mediocre, solo algo tranquilo
Buena vida que agradecer, insulso andar por la ciudad.
Comer, beber, abrir, cerrar,
Lo mecánico es lo seguro
Y lo diferente una inversión a fondo perdido.
¿Eso es lo que me preparas, amigo?
No quiero resignarme,
No deseo que tú decidas mi destino,
Mi voluntad es reducida, pero fuerte
Y tus decisiones, la nada son.
Quiero, adoro, anhelo, deseo, ambiciono, requiero
Da igual el verbo egoísta que escoja.
Sentir el apasionado beso de la piel canela,
Poder cambiar el mundo poco a poco, día a día.
Todos ansiamos dejar nuestra huella,
Todos tenemos nuestra poquita dignidad,
Pero de lo que nadie nos avisó de pequeños
Fue de nuestro amigo el tiempo.
Por eso digo ahora, aprovechad,
da igual con 15 años o con 50,
el futuro se labra, y nunca está perdido
la esperanza es infinita,
y la voluntad su brazo preferido.
Dicen que la esperanza es lo último que se pierde, pero a veces resulta un poco... difícil no dejar que el hastío nos ataque y nos dejemos llevar por lo mecánico, que no deja de ser lo más fácil.
ResponderEliminarDemos pasos hacia delante siempre.
(:
El hastío es la droga del siglo XXI, y el dejarse llevar el mayor obstáculo a vencer de mi vida ;). Gracias por pasarte.
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